Satisfacer las necesidades del cliente ha estado siempre uno de los valores de la empresa. Es por este motivo que la cadena de producción puede permitirse personalizar las líneas de productos. De esta manera un dormitorio o un armario ya de por sí de líneas dinámicas, contemporáneas y atractivo se convierte a más en exclusivo si el cliente lo desea.
La solidez de la marca es debida en gran parte a la elevada calidad de sus productos unida a la personalización con la que ha sabido dotarlos y que es un valor añadido muy importante que el cliente aprecia.